Segundo día: Excursión Monaco, Francia

Entre los muchos sitios que nos ofrecía la costa azul francesa, optamos por visitar la famosa ciudad de Montecarlo, a la que pudimos llegar fácilmente a través de un tren regional desde la estación principal de Niza, ya que cada media hora salía un tren en esa dirección.

Lugares visitados y turismo básico

Nada más salir de la estación, nos aventuramos a visitar el llamado jardin exotique, que parecía atractivo en el mapa turístico que teníamos. Subimos y subimos por las calles que bordeaban las montañas que rodeaban la costa, entre grandes bloques de casas, hasta que llegamos al parquecito. En él solo encontramos caballitos, columpios y juegos para niños...Así que nos dispusimos a bajar, todo lo que habíamos subido para dirigirnos a la zona más turística de la ciudad...

Fue en este preciso momento, cuando cansadas y sudorosas, descubrimos que Monaco estaba lleno de ascensores públicos que te facilitaban la subida y bajada. Así, llegamos a otra cuesta que nos llevaría al Palacio de los Grimaldi. Desde allí pudimos ver unas vistas preciosas de la ciudad y la costa llena de yates, visitarlo por dentro, así como ver el cambio de guardia a las doce del mediodia. Allí mismo, nos reencontramos con Imanol y el grupo de estudiantes con el que estaba dando clases de francés en Niza, y con ellos nos dispusimos a pasear por el pueblecito y jardines que se encontraban al rededor del castillo, la catedral y el museo oceanográfico.

Desde allí, bajamos al puerto, donde si quereís encontrareís una pequeña piscina en la que os podeís dar un chapuzón, ya sabeís al turista son capaces de satisfacerle toda clase de necesidades... Allí pudimos pasear y curiosear entre yates de todos los tamaños, decorados con todo lujo de detalles...como los de las revistas!

Tras ello, fuimos camino del gran casino y sus jardines, que como no para llegar había que subir otra preciosa cuesta, una vez allí nos encontramos con una plaza llena de cochazos, ferraris, porsches, lamborghinis, materazzis..Grandes hoteles con todo tipo de servicios, y como no el casino, que atraía todas las miradas.

Finalmente, nos dirigimos a bajar por el recorrido de formula uno en búsqueda de una fuente en la que remojarnos, y así encontramos un parquecito japonés muy bonito en donde descansamos, antes de volver a enfrentarnos a la subida de la pendiente para llegar a la estación.

Transporte

En Monaco, no es preciso ningun medio de transporte salvo que te quieras pegar un caprichito y conducir un precioso ferrari rojo por el circuito de formula uno o alquilar un helicóptero para tener unas vistas privilegiadas de la ciudad, todo ello por el módico precio de 80 y 85 euros respectivamente.

Experiencia

A parte del calor que pasamos, teniendo en cuenta que todo eran cuestas arriba y abajo, y que estabamos en pleno agosto, la visita mereció muchísimo la pena. Te permite vivir el lujo en primera persona, yates impresionantes, mansiones, el ambiente que rodeaba el casino, coches de lujo llenos de bolsas de Gucci, Channel recogidas por botones...digamos que se te hace la boca agua, así que antes de ir preparados para pasar mucha pero que mucha envidia!!

Consejos

No os aventureís a andar sin tener en cuenta la dirección en la que quereís ir.. sobre todo si es agosto y desconoceís la existencia de los ascensores públicos... Por lo demás, prepararos para que se os caiga la baba...